Un viernes con novedades

Aunque generalmente los viernes son tranquilos, este en particular viene arregladito de noticias. No tanto como en Italia, pero aquí pasan cosas. Por ejemplo, dentro de esa política de emprenderla contra todo lo que no guste, ahora el gobierno, ayudado por los medios afines, la va emprender contra los gordos, porque dice que cuestan dinero –el detallito de que también cotizan se les olvida-. Se estás convirtiendo en una costumbre esto de “recortar” cosas a la vida diaria, y tras el café, la copa y el puro, ahora nos vamos a cargar directamente las tapas. Porque el asunto de los gordos con problemas no se afronta de verdad. Doy fe en carne propia, de que si vas a la SS con el problema, te largan una fotocopia, para todos igual; da lo mismo si tienes 15 años, mujer y 120 kilos; una embarazada de 40, o eres un gordito de casi 60 pasado en 10-15 kilos. No hay preocupación por investigar las causas; fotocopia y a la calle. Así es mejor, es lo tradicional de marear la perdiz, y solo si vas ya con el oxigeno puesto es cuando se hace caso. De todas maneras, en la “sub-noticia” de un periódico dice que en Inglaterra se está estudiando darles dinero a los gorditos por perder kilos. Seguro que Cháves toma nota y promete una subvención, ahora que estamos de elecciones.

Otra cosa; ya mismo se puede ir de excursión al espacio con la compañía del millonario Bransom. Esto es buena idea, sobretodo para los de Barcelona, porque así podrán ir a la Luna antes que a Sabadell.

Y e Málaga, maravilloso; se han aprobado pisos de 22 metros cuadrados. El PSOE ha puesto el grito en el cielo con toda la razón, porque después de haber despotricado contra los mini pisos del Gobierno, ahora no se puede –alegremente- empeorar la cosa. Aunque me parece, que lo que va a decir el PP es que en la licencia de obras no se decía “pisos”, se pidió para hacer conejeras, por eso las están autorizando. A cambio de esta barbaridad, otra más gorda; a los de la Malaya y similares, se les “pide con todo cariño”, que sean buenos y acepten que se les rebajen las penas y las condenas para que no estorben en los juzgados, que están de fontanería. Estupendo, va a resultar que al final, les vamos a tener que estar agradecidos por llevarse la pasta.

Esperemos que el sábado sea más placentero. Por cierto, la plaza no duró ni mediodía sin estructuras insertas.

Pepeprado