Nueva entrada

jueves, 6 de marzo de 2008

Las leyes (nuestras)

Acaban de decir por la radio que el Tribunal europeo ha condenado a España por el caso Eón. Significa que e Europa tampoco tienen claro que aquí se hagan las cosas bien. Yo desde luego no estoy tranquilo con las cosas que se hacen, ya que me da la impresión de que eso de que somos iguales es una chorrada, algunos son más iguales que otros.

El asesino del rol, que se cargó a un señor simplemente porque era “gordito” (como yo) y a él le apeteció en ese momento cargárselo, ya está suelto. A pesar de que los médicos decían hasta hace casi nada que era muy peligroso, ya está de paseo y me imagino que le darán pasta de bolsillo para que se tome unas cervecitas y compre municiones. Se está convirtiendo en peligroso hasta ser gordito aquí con este personaje en la calle. Pero es que somos más buenos que la leche y creemos en los milagros de las conversiones fulminantes a pesar de ser un estado aconfesional. Lo malo es que después ponemos el grito en el cielo porque siguen matando mujeres, y “todos” los hombres somos sospechosos de maltratadores; pero nadie me explica porqué los asesinos -cuando los cogen y te cuentan su historial- tienen una larga lista de reincidencias y estaban en la calle. No le echemos la culpa a la policía, porque si tienen esos historiales es porque los han cogido siempre, lo que pasa es que después los han soltado.

Este personaje está en la calle y en cambio a doña Rosa Díez, candidata legal y reconocida en estas elecciones, se le ha prohibido hablar en una reunión previamente concertada y aprobada en la Universidad de Granada, con el peregrino argumento de “que no se la puede proteger”. La gran pregunta; ¿habría sido lo mismo para los dos súper candidatos, o incluso para el señor Llamazares? Vergonzoso. Por cierto, el señor Llamazares ya ha puesto el cazo; quiere ser ministro y le está diciendo a sus aguerridos votantes que si sale se pondrá a las ordenes del jefe. Una pena y una vergüenza. Tampoco tuvo ningún problema para reunirse la plataforma de los artistas y presuntos intelectuales para congratularse y darse un baño de multitudes con el patrón. Parece que lo de la igualdad de oportunidades anda perdidilla en el marasmo de a campaña.

Con estas cosas es difícil mentalizarse en que estamos en un “estado de derecho”. Más bien parece que estamos en un estado de torcidos.

Para poner una guinda local al asunto, también en Málaga se producen las cacicadas; a una asociación cultural, Zegrí, que tenía permiso para hacer una reunión, manifestación o como quiera que se quisiera llamar, en la plaza de la Merced para reivindicar la capitalidad cultural para Málaga, directamente la Delegación del Gobierno le ha prohibido el acto (yo creía que estas cosas eran de tiempos pasados). ¿Tendrá algo que ver, el que no estén en consonancia con opiniones más selectas?

Lo malo de estos asuntos es que todos somos cómplices por omisión. Salen protestas y manifestaciones porque un futbolista no va a la selección pero dejamos a doña Rosa en la estacada. Para este viaje, no nos hacen falta las alforjas de los debates; que nos digan directamente lo que es lo que tenemos que votar, o mejor que ya directamente voten por nosotros y se ahorrará dinero para nombrar más cargos afectos.

Esto ha salido hoy poco festivo, pero es que el mundo no está para bromas. Me fastidia porque sigo prefiriendo ser optimista, pero me lo ponen muy difícil.

Pepeprado

No hay comentarios:

Publicar un comentario