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lunes, 3 de marzo de 2008

Tras la semana blanca

Ha terminado mi semana blanca, por cierto nunca me llegué a enterar el porqué de lo de “blanca”, más bien la intención era; “en blanco”. Lo que pasa, es que al final esa semana “en blanco” se convierte en una de las más ocupadas del año, porque quieres hacer tantas cosas que se te queda corta. Esa es la razón de haber faltado a la cita conmigo mismo que tengo en esta página. Espero que los amigos que me leéis habitualmente me perdonéis. Prometo que he vuelto a la normalidad diaria.

Lo bueno, es que en estos tiempos no ha pasado casi nada, porque los líos ínter partidos, las discusiones, los sondeos, etc., siguen igual. Menos mal que por lo menos parece que nos vamos a escapar de un debate Doña Magdalena/Doña Celia (Dios existe, he aquí la prueba). Los sondeos siguen dando noticias pintureras que generalmente todos sabemos que después no dan en ningún clavo pero que, también después, los sondeadores defienden valerosamente; “que en sus resultados estaban implícitos” los que después salieron. Es decir, que no sabemos entenderlos; que somos unos burros, vamos.

Para que nada cambie, hoy nos amenazan con otro debate de esos en los que se nos va la vida y en los que no se debate nada, porque debatir es discutir, proponer, rebatir, y cosillas así. Lo que nos dan son arengas personales y partidarias que además no nos aclaran casi nada. Entre tanto, aparece una noticia en la Opinión; Cuatro, en busca del más listo de España”. Tiene tela, sobretodo porque lo van a buscar como siempre con castings y cosas así. Mi gran pregunta es: ¿Cómo unos señores (los de la Cuatro) que no se han distinguido por su clarividencia, van a saber elegir entre los más listos? y los segundo; ¿Se les va a pedir a los aspirantes a más listo, también, el ser “el más afecto” al régimen? Bueno, si lo encuentran vale. Aunque lo más listos son los que llegan a una cierta edad sin haber pegado un palo al agua, muchas veces metiéndose a políticos (porqué hay algunos…).
Todo esto, en Rusia lo han solucionado. El más listo es Putin por lo bien que se ha organizado. Ha ganado unas elecciones sin presentarse a ellas; a ver quien lo supera.

El Cháves ultramarino se ha lanzado al sendero de la guerra. La primera víctima ha sido el latín. El ciudadano se ha cargado una lengua milenaria, madre de muchas lenguas nacionales en un plís plás. El borrico este va a terminar liándola, lo que es más grave es que al final seguirán muriendo los de siempre, los currantes de a pie. El líder carismático dará órdenes, pero las dará desde lejos.

Menos mal que nuestro Cháves es más pintoresco pero menos guerrero, a lo único que le tiene declarada la guerra es a los Ayuntamientos, y no a todos, solo a los desafectos. Aquellos ayuntamientos que puede que hagan falta para cuadrar las cuentas, por ejemplo el de Córdoba, se les trata de otra manera. A Málaga, lo de siempre.

Hablando de Málaga, una noticia terrible; “Familias de clase media acuden a Servicios Sociales para comer”. No es noticia baladí para dejarla pasar. En estos tiempos en que todo se estabula, se organiza, se contabiliza, se muestrea y demás leches, nadie se ha parado a pensar que estas son familias que están cambiando de nivel; están pasando y no por gusto, de ser unas “familias de clase media” a ser “presuntos pobres”. Nada más y nada menos. Esto es de verdad los que nos tiene que preocupar, sobretodo a esos políticos que hablan de las macrocifras y se olvidan del puchero diario de los ciudadanos. Que están más pendientes de colocar amiguetes, que de solucionar la compra diaria. Esto también nos debe hacer reflexionar sobre si es tan importante darle una pensión multimillonaria vitalicia a Raúl o pagarle el champú a Ronaldinho o de verdad, lo que tenemos que hacer es echarle una mano a esta sociedad.

Lo dicho, la semana ha sido corta. Todo sigue igual, es decir, yendo a peor y ellos sin enterarse.

Pepeprado

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