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sábado, 12 de julio de 2008

Congresos y demás chorradas

Tengo que reconocer que los congresos de los partidos son una mina. Creen estar obligados a decir tantas cosas que se desparraman mentalmente. El del PP fue un gallinero donde el que más cantó fue un gallo viejo y con voz desagradable, pero el de los otros está también luciéndose a lo grande. Lo primero de todo (se supone) es ver la situación, después ver las soluciones, y la verdad, en esto, están sembrados. Los problemas son económicos y sociales, (no olvidemos que están en, y son, el gobierno) pero, parece que estos problemas, solo “pasan por al lado”; Congreso del PSOE-A La inflación trepa al 5%, su nivel más alto en13 años, y el Gobierno culpa al petróleo”. Esto solo como muestra; se podría hablar de la no-crisís, del IPC, de las hipotecas, etc., pero no, hay cosas más importantes; “El PSOE busca una mujer para presidir el Tribunal Supremo y el Poder Judicial” Está visto que lo de ser machote a la antigua está muy desprestigiado, ahora, en vez de buscar a quién valga más, se busca a quién no sea varoncito tradicional, da lo mismo la trayectoria profesional o vital. A mi me tendrían que explicar donde leches está la igualdad en el asunto, ya que automáticamente se está descartando a casi toda la judicatura “discriminándola por cuestión de sexo”, en contra de ese libro gordo llamado La Constitución, que, creo recordar, nos dijeron que era “la leche de importante”, el non plus más.

CAPÍTULO II.

DERECHOS Y LIBERTADES.

Artículo 14. Los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.

Afortunadamente, hay ciudadanos que están venturosamente exentos de pasar estos examenes previos; Chaves, 2012: "Allí estaré"”. Menos mal, ¿Qué íbamos a hacer sin don Manuel?, pero… y del Presidente de verdad, ¿alguien le ha preguntado al señor Zarrías si él también sigue? Por favor, que lo aclaren pronto, estamos en un perpetuo anhelo, en un sin vivir constante.

Dejando estas frivolidades aparcadas a una sombra agradecida, hay también cosas importantes que son las que preocupan a la muchachada, (y a algunos viejales majaras que van de progres impenitentes); El nuevo iPhone ya está aquí ¡Menos mal! ¿Cómo hemos podido vivir sin el Aifón de los coj… hasta hoy? Ahora nos quedan días y días con las teles y los periódicos dando la vara y ayudando en sus telediarios y secciones serias a la multinacional de turno en su campaña publicitaria para convencernos de que, si no tenemos un Aifón el próximo lunes… es que somos unos desgraciados integrales. Bueno, el próximo lunes no, porque, ¡hay listas de espera!. La leche; el nivel de gilipollez al que se ha llegado es inconmensurable. Apuntarse a una lista de espera para gastarse los cuartos en algo totalmente prescindible, es rizar el rizo de la insensatez, pero si se quiere “estar al día”, ser guay y/o sentirse importante en esta sociedad de orillo y cartón piedra… ¡hay que tener un aifón... yá!

Pero entre todo, alguien se ha preocupado por investigar cosas de por aquí;'Columpiarse' con la edad" Recomiendo leerse este articulo. En él, se mira a esa llamada enfermedad (la única enfermedad que a todos nos gustaría padecer eternamente), cuya cura es inevitable (la juventud es una enfermedad que se cura con el tiempo, dijo alguien). Y recomiendo leerlo porque aunque no disculpa, porque en ningún momento incluye el estudio de la insensatez, ayuda a mirar en los inexplorados recovecos mentales de doña Bibiana, que vive en ese Nirvana temporal de la juventud practicante, de forma intensa y exacerbada.

Antes de despedirme, información personal.

Como he sido, pero que muy bueno, mi mujer me lleva de viaje. Intentaré seguir el día a día literario, pero como vamos a eso que antes se pronunciaba con reverencial respeto, “el extranjero”, no puedo garantizar la ininterrupción de la plasmación diaria de mi embarazo mental. Si falto algún día, será por algo importante; problemas en las comunicaciones, falta de medios técnicos o marasmo personal agravado por la buena mesa y la adecuada privanza. Gracias por la comprensión, hasta que vuelva, vigiladme mi Plaza.

Hasta… no se cuándo, espero que el lunes mismamente.

Pepeprado

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