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miércoles, 11 de marzo de 2009

La comodidad

La Biblia de nuestra palabra, el DRAE, dice lo siguiente de este término:

Comodidad/Del lat. commodĭtas, -ātis.

1. f. Cualidad de cómodo.

2. f. Cosa necesaria para vivir a gusto y con descanso.

3. f. Ventaja, oportunidad.

4. f. Utilidad, interés.

Esto viene a cuento de la perla de don Pedro; Solbes se siente "cómodo" y no quiere dejar de ser ministro Como no creo que su actuación le sea “cosa necesaria para vivir a gusto y con descanso”, me parece que el ministrázgo de este señor y de varios/as otros/as, se acopla con facilidad de guante a las otras acepciones; ventaja, oportunidad, utilidad e interés. Como todos somos mayorcitos, repasemos cada cual, las listas de ministros, consejeros, similares y asimilados (léase asesores voluntarios), y comparemos sus actuaciones con estas definiciones. Digo esto, porque ya estoy hasta el gorro de frases tales como; “yo estoy para servir”, “vengo a entregarme a mi tarea”, “me sacrifico por la comunidad” y demás usadas por los salvapatrias al uso. No necesito que nadie me salve de nada, quiero buenos gestores para que todos estemos mejor y que usen la pasta de todos para el bien de todos. Así, que don Pedro, no se sacrifique por mí, ni por los 3,5 millones, descanse Vd. Y si de paso, se lleva a un terrenal descanso a las ministras guerreras, mejor.

Mientras estos señores se auto contemplan como ombligo del mundo, las cosas que pasan son de preocupar. El TS ha echado abajo el pasaporte gratuito para los estudiantes que no dan golpe; la ministra viceZp, ya ha dicho que va a mirar a ver como nos lo vuelve a colocar para que cuele (lo importante es cuadrar las estadísticas). Como primera medida, se amplían las clases de apoyo, se dan becas para “que vayan más a clase”, me imagino que se buscaran más psicólogos, etc…, todo menos decirle a los ciudadanillos que la vida es dura y que hay que currársela desde ya. Lo siguiente será echarle la culpa a los maestros/as, al primero que pase por la puerta del colegio, a la oposición, o a cualquiera, menos a los que han dado vía libre a este tipo de educación.

Lo malo, es que esta falta de preparación y cultura, ya se está “derramando” por la sociedad, en la que, para mejorar la cosa, por si no tuviéramos bastante con nuestros propios aculturizados, nos traemos de fuera, atraídos por nuestro Código Venial, a lo mejorcito de cada casa o país.

Ejemplos, los que se quieran; Una doctora está grave tras recibir cuatro tiros en un centro de salud de Murcia”. Ser médico/ca ya es una profesión de alto riesgo. Doña Ministra de la Igualdad, ya ha conseguido que ser médico sea “igual” a ser Boina Verde en Vietnam. Policía, ni te lo cuento; Detenido por intentar matar de un disparo a un guardia civil que le recriminó por orinar en la calle/La investigación apunta a que el arrestado apuntó al pecho del agente y apretó dos veces el gatillo, pero el arma se encasquilló” Esto son solo una par de muestras, leer los periódicos o ver telediarios es una empresa penitencial. Esto es lo que hay. Por ahí hay una ministra que anda hablando de prehistorias; Espinosa afirma que "estamos en la prehistoria de una sociedad sostenible" ¿En que quedamos? ¿No éramos la locomotora de Occidente? ¿El Paraíso Terrenal del mundo mundial?, ¿No atábamos los perros con longanizas?...

Si hasta esta chorrada que viene a continuación es difícil; “Los familiares pueden borrar el rastro digital que deja una persona al morir Ya ni a los muertos se los deja en paz…

Aparentemente lo importante es si le damos la medalla de las Bellas Artes a alguien de la GG (Gente Guapa, los elegidos del Hola); o si perdemos el tiempo con las causas abierta para después no poder cerrar del Juez Cobrador; o si nos dedicamos a proponer que se pueda abortar en las panaderías; o si destripamos en las teles los asesinatos y atentados de moda para sacar tajada partidaria, o si… mejor dejarlo.

El haber retomado nuestra actualidad tras mi alejamiento, hace que la cosa se me indigeste más de lo habitual. No me ha pillado preparado.

Lo dejaré hasta mañana e intentaré ir acostumbrando la mente a lo que aquí se considera “normal” y cotidiano y que yo estaba olvidando, para poder ir tirando.

Hasta mañana.

Pepeprado

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