Inmundicias

No voy a mirar los periódicos, al menos por hoy. Estoy harto de oír inmundicias y ver gorrinadas. Lo peor es que munchas de estas vienen del ámbito judicial.

Qué es si no, la afirmación del abogado del ex Em-Palma-do, ahora llamado Em-Barga-do (aportación de mi primo JA), que alega, con toda tranquilidad, eso de producirle a su defendido “un empobrecimiento injusto”. Hace falta tener cara para echar por delante este argumento en estos tiempos en que en  el Hit parade de la popularidad están “empresas” como la Cruz Roja, Cáritas y similares, porque, gente como su defendido se lo ha llevado por  la cara.

Tampoco hay por donde coger al señor Miquel Roca y sus adláteres que piden que los políticos ganen más, incluyendo unas declaraciones del alcalde de Barcelona, que es casualmente el que más gana en toda España, muy por encima del Presidente del Gobierno, y que alega que “así se evitarían tentaciones”. Por lo visto a este ¿señor? se olvida de licenciados que están trabajando por 400 euros, y a veces ni eso, sin cobrar; de obreros que llevan años en el paro; de empresarios que han quebrado, y tantos así.

Que a esos, independientemente de su actualidad, se les exige la honradez, sin aceptarles eso que él llama “tentaciones”. Este tío es un impresentable y hace un razonamiento perverso; él opina que a la política hay que ir a ganar dinero rápidamente, y que eso tiene que ser gracias a un sueldo monumental porque en la privada se gana más. El razonamiento es exactamente el contrario. Dejando aparte eso que decía don Jean Paul Sartre de que, “felicidad no es hacer lo que uno quiere, sino querer lo que uno hace”, a la política hay que ir a servir, e incluso voy más allá, hacer su trabajo tan bien, que después, la empresa privada quiera ficharlo. Así no pasaría que estuviéramos dándole pensiones tras solo unos añitos de politiqueo, a inútiles como el señor Rodríguez Zapatero, al que no va a fichar ni el Alcoyano por mucha fe que a este equipo se le presuponga, ni a tener que “colocar” en fundaciones, consejos de administración a los Blancos, Calderas, Ratos, y demás ralea.

Cuando estaba escribiendo sobre estas gorrinadas, en la radio escucho la última. Un juez del TSJ de Andalucía, de nombre don Miguel Pascual, acaba der archivar las causas contra el alcalde revolucionario, Sánchez Gordillo, las que tenía por haber atracado los Mercadona, y haber amenazado a trabajadores y clientes. Dice este probo juez, que esas cosillas, las hacía en un legítimo uso de su derecho a la huelga donde las coacciones son admisibles. Acaba de dar barra libre a todos los que quieran atracar supermercados o joyerías, les basta con llevar una pancarta y decir el atracador que está en huelga por el aplastamiento de los caracoles cuando cruzan las carreteras, y ale, a llevárselo por la cara.

También en Málaga, hechos como mínimo sorprendentes. El ex gerente del Teatro Cervantes, ahora recolocado en otra sinecura, quiere además apuntarse para cobrar en una empresa privada, eso sí, a la vez, sin dejar su enchufe. Es sorprendente que en estos tiempos en que encontrar un trabajo es tarea de titanes, algunos de estos linces estén pluriempleados y además sean válidos para todo.

Me voy, me estoy poniendo de los nervios y hoy tengo abuelazgo, mejor calmarme.

Hasta mañana

Pepeprado