Eso, hemos echado fuera el tercer y último día en Roma, porque ya mañana, cogemos el avión de vuelta por la mañana, así que por la tarde ya estarémos en casa.
Este último día lo hemos empleado en ver lo que hemos podido, incluida, cómo no, la obligada visita a la plaza Navona, que es un puro alucine.
Lo único malo que tiene esta ciudad, es que te vas, sabiendo que te dejas atras una inmensa cantidad de cosas por ver. A pesar de haber entregado el ramo a diario para poder ver cosasa interesantes, sé que nos dejamos muchas en el tintero. Qué se le va a hacer, si podemos, volveremos.
Aparte de lo monumental, es interesante ver el ambiente. Lo más llamativo es que es verdad que somos primos hermanos. Vas por la calle y la gente que ves es la misma que ves en tu ciudad. Y cuando hablan, hasta que no prestas atención, no distingues que esten hablando en otro idioma, la sonoridad y la musicalidad es la misma. Vamos, que te sientes más en casa que en algunas ciudadaes del noroeste de España, donde el lenguajes es más, digamos, "àspero".
En lo que sí he visto diferencia es en los nuevos italianos. Nuestros nuevos españoles son en gran cantidad, moros. Aquí hay pocos, pero sus nuevos ciudadanos son en su mayoria indios (de la India, no del Far West). Lo menciono cómo curiosidad, aunque seguro que alguno le saca punta al comentario. Al que piense mal, que lo zurzan.
Ahora mismo, TVE está hablando de las inundaciones italianas en la Liguria. Aquí, han hecho unos días fantastricos. Esta mañana, un par de veces ha aparecido un ligero chispeo, pero sin llegar a mojarme el sombrero, así que tranquilidad.
Sigo escuchando en la tele que sigue yendo gente al trullo, aunque ahora han estado haciendo una inteligentísima encuesta sobre que le parece a la people el asunto Pantoja, cómo si eso fuera lo más importante del mundo. Lo realmente importante, es que nadie devuelve un duro, incluida esta presunta señora. Aquí, algunos se forran, despues dos días a la carcel, y tras esto, a disfrutar del botin, incluso redondeándolo con algunos bolos televisivos bien pagados.
Bien, acabo, y espero que para mañana ya volveré a horarios más normales y costumbres más tradicionales. Pondré fotos, incluyendo una de un cartel que no tiene desperdicio. No aclaro nada, ya la vereis, es un documento.
Hasta mañana.
Pepeprado. .
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