Ya olvidadas las fiestas, estamos en lo que
llamamos normalidad, es decir, tiroteos, estafas y demás tropelías del ser humano.,
En el país
vecino, nos cuentan que los asesinos están localizados y atrincherados, pero…
con rehenes, lo que augura más muertes antes del final.
Por aquí,
nuestro Ministerio del Interior ha reforzado el control sobre los islamistas radicales
que consideran peligrosos, lo que a buen seguro hará qué, ya mismo, salgan a
flote los güenistas de cabecera para protestar por ello.
Esta mañána, temprano, oí una reflexión
sobre la diferencia entre la reacción política francesa ante esta catástrofe,
muy parecida a la americana ante el 11S, y la que tuvo nuestra clase política
ante el 11M. Muestras ambos países se agruparon para luchar contra los asesinos,
aquí, el mismo día del atentado, la oposicion se lanzó a la yugular… del
Gobierno. No hubo lucha contra los terroristas, sólo se acusó de asesinos a los
miembros de ese gobierno. Todo, simplemente para sacar tajada electoral de los
muertos. Con este precedente, dado por partidos presuntamente democráticos y respetuosos
con la Constitución, no es de extrañar que ahora, los de Bildu y demás congéneres,
anden escondiéndose para no tener que condenar el atentado, ni que los de ETA,
qué, con la “comprensión” de algunos jueces, ya huelen su libertad, publiquen
que no están arrepentidos de nada y que nunca van a ayudar a la policía a
encontrar a sus colegas en los asesinatos de entonces. Como siempre, tenemos lo
que nos hemos buscado con nuestros votos.
En algo más ligero, ha nacido una estrella;
el señor Piketty. El profesor de la Esc. de Economía de París, que le dijo
nones a la Legión de Honor, ahora, cuando se ha visto en la cresta de la ola,
ya dictamina sobre la ecop0nomía española y le da coba a los de Podemos; “Es un error afirmar que lo peor de la
crisis ha pasado ya”. Otro que ya lo sabe todo.
La que ha triunfado totalmente, es doña
Mariló Montero, que a fuerza de meter la pata, aunque no consigue que la echen
de TVE porque allí es muy querida, ha conseguido que en los premios Gerardo, los
que eligen a los peores de la tele, hayan tenido que crear una “categoría especial”
para ella. Pero en TVE la siguen amando locamente… y pagándole un pastón.
En terrenos cortijeros, doña Susana sigue
navegando por espacios siderales, y viendo todo “normal”, mientras doña
Mercedes sigue empapelando gente de la suya. Es verdad, todo normal.
En Aquí, sorprende la condena a un camello
en silla de ruedas. Al leerla, te enteras que el angelito embistió a los maderos
y llamó a sus congéneres y hubo que recurrir a “doce” patrullas de la policía para
poder arrestarlo. Todo esto pasó en Palma-Palmilla, donde los güenos dicen que todos
son es muy normal.
Y mira por donde, a la concejala luxury, la
que gusta de salir en fotos y que dice saberlo todo, le va a salir un grano; “El empresario que llamó a Porras
acapara 329 contratos municipales”.
Es ese empresario qué, para empapelar a los de la grúa, la llamó para que se los
quitara de encima, y que ahora, ha resultado ser un hombre con mucha suerte;
todos los contratos municipales le caen a él. A ver como termina esto,
seguramente como siempre, en silencio administrativo.
Me
voy, hoy hay Foro, tengo que ir tranquilito.
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